20 junio 2011

EL PANISTA MICHEL TORRES AMENAZA Y ENCARCELA A LOS JALPENSES

Jerónimo Gurrola Grave

Muy común es en México que los políticos, en su afán de ocupar un puesto de elección popular, haciéndose los carismáticos y conocedores de las necesidades del pueblo, prometan a los votantes solución a todos sus problemas, pero tan pronto como llegan al poder por muy insignificante que sea el puesto logrado, engreídos, desconozcan, maltraten y se dirijan despótica y autoritariamente hacia el pueblo que confió en ellos.
En México como en muchos otros países, los derechos y libertades del común de los ciudadanos inician y terminan, en la elección de sus nuevos gobernantes, de sus nuevos amos, salidos de uno u otro partido político a través del voto popular, de allí en adelante ningún otro derecho tienen, sobre todo los de organización y petición para resolver urgentes necesidades que alivien un poco las terribles condiciones de pobreza y marginación en que viven.
Ni más ni menos así está ocurriendo con varios cientos de campesinos, del municipio de Jalpan de Serra, en la Sierra Gorda queretana, organizados en el Movimiento Antorchista, que están siendo víctimas de la prepotencia y la represión policiaca por el presidente municipal panista Miguel Ángel Torres Olguín, por el hecho de reclamar el cumplimiento de obras elementales que él personalmente se comprometió realizar desde agosto de 2010 entre las que se cuentan: la construcción de un muro de contención en la Esc. Sec. de Sabino Grande, la puesta en marcha de la planta tratadora de aguas residuales de Tancama, pavimentación de la calle principal en Rincón de Pitzquintla, ampliación de luz en Manzanillos y ampliación de agua potable en Mohonera de Gudiño entre algunas otras. Como se ve, obras muy urgentes y que no están fuera del alcance de los recursos que maneja el señor alcalde.
Igual suerte ha corrido un grupo de comerciantes semifijos a quienes se les decomisa su mercancía y se les encarcela por no aceptar colocar sus puestos en las orillas de la población y los miembros de la Asociación de Transportistas de la Sierra a quienes sin ninguna explicación constantemente les detienen sus vehículos; y lo más grave, con el pretexto de que el dirigente regional de los inconformes organizados en Antorcha Campesina Alonso San Agustín Velasco no es originario de Jalpan, el presidente municipal Torres Olguín ha mandado a sus empleados a colocar cartulinas en varias comunidades con amenazas de muerte, al igual que contra Juan González Morales.
Éste es el estilo de gobernar del presidente Torres Olguín, nada raro si tomamos en cuenta que es adicto al ex gobernador Francisco Garrido Patrón y a Alfredo Botello Montes, destacados integrantes de la famosa secta ultraderechista “El Yunque”.
Miguel Ángel Torres Olguín, como buen político panista, autoritario y con ínfulas de dictador, siente un profundo desprecio por el pueblo y de manera especial por el pueblo organizado y consciente, pues, lo considera un estorbo y un peligro para la paz social, y concluye que lo más conveniente es mantenerlo a raya y fuera del alcance de los recursos y programas que él maneja.
Pero, contrariamente de lo que Michel y sus patrocinadores creen, el pueblo trabajador, aunque humilde, posee una gran inteligencia y un gran instinto de clase que le permite detectar con exactitud a sus verdaderos enemigos, y no hay duda de que a pesar de que son muy pocos los mecanismos con que los pobres cuentan para hacerse escuchar, los antorchistas jalpenses los sabrán aprovechar muy bien para librarse de este dictadorzuelo, como lo hizo ya el antorchismo estatal con Garrido Patrón y Botello Montes.
No hay duda, el pueblo pobre consciente, sepultará por completo lo que queda del panismo en el Estado de Querétaro y en el país entero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario